Un inversor de origen venezolano es el nuevo dueño del local situado en el número 83 del Paseo de Almería, paredes que durante tres décadas han acogido a la tienda insignia de Zara en la capital andaluza que da nombre a la calle. Así lo ha desvelado el diario La Voz, que ha cifrado en seis millones de euros el importe de la transacción, revela El Confidencial.
La vendedora es la propia Pontegadea, dueña de la empresa de moda gallega y brazo inversor del empresario Amancio Ortega, un gigante con más de 15.000 millones en activos inmobiliarios, en cuyas entrañas todavía sigue descansando una cartera de tiendas históricas del grupo Inditex.
Muchos de estos establecimientos están ubicados en las principales arterias comerciales de ciudades de toda España, como ocurre en Almería, ya que Zara siempre apostó por que la mejor publicidad posible pasaba por hacerse con los mejores escaparates.
Esto permitió a Ortega construir una cartera de locales comerciales ligados a sus tiendas que, hoy en día, tienen un peso más histórico que económico dentro del emporio que ha levantado el empresario gallego con Pontegadea. En Almería, el inmueble que ha vendido consta de tres alturas y se desconoce cuál será su nuevo destino.
Aunque se ha filtrado ahora la operación, debido a la trascendencia que tiene en una ciudad como Almería el cierre de Zara, decisión que se enmarca dentro del plan de recorte de 300 establecimientso en toda España, la venta del inmueble se habría producido hace ya varios meses, según las fuentes consultadas, que también apuntan a que este tipo de contratos contemplan ya compensaciones ante la posible marcha del inquilino, como ha ocurrido en este caso.
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