La nación caribeña de Trinidad y Tobago le pide al gobierno de Estados Unidos que cambie los términos de una licencia que le permite desarrollar en conjunto con Venezuela un campo de gas en alta mar con mucho potencial, informó el ministro de Energía trinitario.
El gobierno de Trinidad ha hecho un intenso lobby ante Estados Unidos para que le permitan llevar a cabo su proyecto gasífero en conjunto con Venezuela, ya que considera que es vital para su economía y su seguridad energética. Trinidad depende en gran medida del gas natural para generar electricidad y exportar productos petroquímicos, pero sus reservas han disminuido en los últimos años. El proyecto Dragón le daría acceso a una fuente de gas cercana y abundante, que podría beneficiar tanto a Trinidad como a Venezuela.
En enero, Estados Unidos otorgó una autorización de 2 años para que Trinidad y un grupo de empresas, entre ellas la estatal venezolana PDVSA y la anglo-holandesa Shell (SHEL.L), reanuden un proyecto paralizado que podría permitirle a Trinidad aumentar el procesamiento y las exportaciones de gas a sus vecinos.
No obstante, la licencia estadounidense para el proyecto Dragón, ubicado cerca de la frontera marítima entre los dos países, impide cualquier pago en efectivo al gobierno del presidente venezolano, Nicolás Maduro, o a sus empresas estatales.
El mes pasado, el primer ministro trinitario, Keith Rowley, y el ministro de Energía, Stuart Young, se encontraron en Washington con la vicepresidenta estadounidense, Kamala Harris, para plantear los cambios solicitados. En parte, tienen que ver con los términos financieros, le dijo Young a Reuters al margen de la 7ª Cumbre Internacional de Energía en Miami.
“Aún hay algunos cambios que se deben hacer y que estamos pidiendo. Pero eso siempre es parte de negociaciones energéticas muy complejas y sofisticadas”, dijo el ministro. No quiso dar más detalles.
PDVSA, el Ministerio de Petróleo de Venezuela, la Casa Blanca de Estados Unidos y el Departamento del Tesoro no respondieron inmediatamente a las solicitudes de comentarios, según Reuters.
Se prevé que Trinidad y Venezuela se reúnan nuevamente este mes para empezar a discutir los términos comerciales de Dragón. Ambas partes firmaron acuerdos confidenciales y comenzaron a discutir aspectos técnicos en reuniones previas.
Desde el año pasado, EE. UU. ha flexibilizado algunas sanciones a Venezuela al emitir o modificar licencias específicas para fomentar las negociaciones políticas hacia las elecciones presidenciales en el país. Esas conversaciones han mostrado poco avance.
Este mes, Trinidad planea anunciar los ganadores de una ronda de licitación por bloques terrestres y marítimos en el país, después de evaluar las ofertas, dijo Young.
Las negociaciones con BP <BP.L> y Shell sobre los términos para la exploración y el desarrollo de bloques de gas y petróleo en aguas profundas adjudicados en una subasta distinta también podrían concluir pronto, dijo.
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