A medida que la fe se entrelaza con el fervor popular, las controversias en torno a la figura del venerado beato venezolano, el Doctor José Gregorio Hernández, parecen intensificarse en la comunidad católica de Venezuela. Recientemente, la Arquidiócesis de Caracas ha enfrentado un nuevo escándalo, esta vez relacionado con la comercialización indebida de supuestas reliquias del llamado «médico de los pobres».
El foco de la discordia radica en las acciones de Mauricio Donellu y Sócrates Serrano, autores que, aprovechando el lanzamiento de su libro «Grego», una obra que rinde tributo a través de una serie de fotografías al beato, han sido acusados de incluir una reliquia falsa dentro de un álbum fotográfico. La vicaría para la santidad ha denunciado que dicha inclusión no cuenta con el aval eclesiástico requerido, y que solo el cardenal arzobispo, previa una petición formal y el soporte de la autoridad eclesiástica superior de Caracas, tiene la facultad de otorgar reliquias auténticas.
Esta denuncia ha sido formalizada por medio de un comunicado oficial de la Arquidiócesis de Caracas, firmado por el Padre Gerardino Barracchini, vicario episcopal para la santidad, donde se subraya su completa desvinculación con cualquier beneficio económico o participación en la venta de estos objetos religiosos que invocan la imagen de José Gregorio Hernández.
Escándalos recientes en la Iglesia Católica venezolana
No obstante, esta no es la primera vez que la institución eclesiástica se ve envuelta en controversias. Hacia finales del año pasado, algunos medios de comunicación reportaron acusaciones sobre intereses particulares entrelazados en el proceso de canonización del Dr. Hernández, gestiones compartidas por las arquidiócesis de Caracas y Miami. Además, se puso en tela de juicio la legitimidad del milagro atribuido a la figura del beato, cuestionando la reputación de la persona presuntamente favorecida por dicho milagro.
En un evento separado, pero igualmente significativo, el Ministerio Público de Venezuela anunció en diciembre de 2023 la apertura de una investigación contra un grupo de sacerdotes del estado Miranda, implicados en supuestos actos de corrupción. La indagación surgió como respuesta a múltiples denuncias recibidas, y el fiscal general, a través de la red social X, informó que había asignado a la Fiscalía 21 nacional la tarea de esclarecer y castigar a los implicados en estos lamentables hechos.
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