Restaurante Altum, vinculado con el detenido Rafael Hernández Quintero y la corrupción en PDVSA y la Sunacrip, es intervenido por la PNCC

Restaurante Altum, vinculado con el detenido Rafael Hernández Quintero y la corrupción en PDVSA y la Sunacrip, es intervenido por la PNCC

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El restaurante Altum, que ofrecía una experiencia gastronómica a 50 metros de altura en una plataforma elevada por una grúa, fue objeto de una medida de aseguramiento por parte de la Policía Nacional Contra la Corrupción (PNCC) el pasado lunes 15 de mayo en Caracas. El establecimiento, que tenía capacidad para 25 comensales y 8 empleados, cobraba entre $140 y $180 por un menú exclusivo. Su dueño oficial es Nelsy Blanco Gil, quien también posee el Buono Restaurante en Altamira.

Nelsy Blanco Gil

Blanco había anunciado el cierre de Altum días antes de la intervención policial, argumentando que los comensales tenían “miedo a las alturas” y que no había suficiente clientela. Sin embargo, la PNCC sospecha que el restaurante está vinculado con hechos de corrupción administrativa y malversación de fondos públicos, relacionados con la mafia de PDVSA y la Superintendencia Nacional de Criptoactivos (Sunacrip).

Según una fuente experta del medio digital La Tabla, el empresario Rafael Hernández Quintero, detenido recientemente por la PNCC, era socio de Blanco en Altum y testaferro de Joselit Ramírez, este último, exjefe de la Sunacrip y hombre de confianza del ministro de Petróleo Tareck El Aissami. Ramírez fue capturado por la PNCC mientras se realizaba una reestructuración de la Sunacrip, el organismo encargado de promover el petro, la criptomoneda impulsada por el Gobierno venezolano.

El aseguramiento de bienes es una medida cautelar que busca preservar los bienes que puedan estar involucrados en algún delito. La PNCC ha emprendido una operación contra cargos públicos del chavismo cercanos a El Aissami, así como contra jueces y alcaldes revolucionarios. La grúa de Altum sería uno de esos bienes que podrían haber sido adquiridos con fondos ilícitos.

Perfil

Rafael Eduardo Hernández Quintero es un empresario y funcionario público vinculado a Tareck El Aissami y a Joselit Ramírez, este último de señalado de estar involucrados en una supuesta red de corrupción en PDVSA y SUNACRIP. Hernández Quintero fue detenido por la Policía Nacional Contra la Corrupción (PNCC) y se le acusa de varios delitos.

Sobre Rafael Eduardo Hernández Quintero se conoce que ha sido fue Coordinador Administrativo del Monumento Bicentenario de la Batalla de La Victoria en 2017, cuando El Aissami era gobernador de Aragua.

Hernández Quintero es dueño, junto a Daniel Alejandro Sifuentes Contreras, de la empresa JMT Solution Technology, que fue contratada como proveedora del Carnet de la Patria en 2017, violando la Ley del Estatuto de la Función Pública y la Ley contra la Corrupción. Hernández Quintero también aparece como trabajador de la Vicepresidencia General de la República en el Seguro Social.

Hernández también ha fungido supuestamente como testaferro de Joselit Ramírez, exjefe de la Sunacrip capturado por las autoridades venezolanas. Rafael Hernández Quintero ha participado en el negocio del restaurante Altum, que fue incautado por la PNCC el pasado lunes 15 de mayo. Hernández Quintero y Ramírez fueron compañeros de estudios en la Universidad de Los Andes (ULA) junto con El Aissami.

Hernández Quintero es considerado una figura de confianza Joselit Ramírez, ficha de El Aissami, quien ha ocupado cargos como vicepresidente ejecutivo, ministro de Petróleo y gobernador de Aragua.


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