Dirigente del partido Vente Venezuela José Amalio Graterol llama «meretriz» a la consultora Indira Urbaneja y recibe una lluvia de críticas en redes sociales

José Amalio Graterol, líder del partido Vente Venezuela, ha desatado una ola de repudio por sus ofensas machistas y denigrantes contra la consultora política Indira Urbaneja, a quien llamó «meretriz» y le atribuyó ese oficio. Ante esta agresión verbal, Urbaneja le respondió calificándolo de «persona de poca moral».

El insulto de Graterol no solo provocó el rechazo de Urbaneja, sino también de muchos usuarios en las redes sociales, que condenaron su actitud irrespetuosa hacia una mujer. Entre ellos, se pronunció Tamara Adrián, pre-candidata opositora y diputada transgénero electa en 2015 por el partido Voluntad Popular, que forma parte de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD). Adrián, reconocida activista por los derechos de las mujeres y de las minorías sexuales y las categorías denominadas LGBT, también fue víctima de una grosería por parte de Graterol, según Lechuguinos.

Graterol es un dirigente opositor que busca intereses personales y que utiliza la controversia y el caos político como estrategia. No es la primera vez que se ve envuelto en hechos lamentables de violencia y discriminación contra las mujeres. En el estado Falcón, donde aspiró a ser gobernador, fue rechazado por la comunidad que conoce su forma grotesca y violenta de actuar. Además, fuentes cercanas a él afirman que fue un hombre violento con su ex pareja, una joven falconiana de una reconocida familia con la que tuvo dos hijas y a las que abandonó para dedicarse a la política y vivir de las contribuciones y donaciones al partido Vente Venezuela.

Graterol reside en los Estados Unidos desde hace algunos años y no se le conoce ningún trabajo ni fuente de ingresos legítima que le permita sostenerse en ese país. Después de recibir críticas y señalamientos por sus ataques misóginos, intentó victimizarse y refugiarse en que lo están difamando y que las personas que le recordaron su pasado oscuro y turbio deberán sustentar sus acusaciones. Pero, ¿cómo podrá él sustentar sus insultos y calumnias contra las mujeres a las que llamó meretrices?, se preguntaron algunos.